lunes, 24 de noviembre de 2008

Sólo once de los más de 3.000 dependientes recibe la ayuda


El PP denuncia las carencias de los servicios sociales municipales y la escasa inversión ·· El gobierno se compromete a poner en marcha el plan 2009-2013

"De los más de 3.000 dependientes que hay en la ciudad, sólo once están recibiendo las ayudas que establece la ley". Ésta fue una de las denuncias del Partido Popular en el pleno extraordinario celebrado ayer a petición de la oposición para fiscalizar la gestión del departamento de Bienestar Social.
La concejala Paula Prado, responsable del seguimiento de esta área, afirmó que "en política social el Ayuntamiento no avanza", recordando que Raxoi sólo destina el 2,77% del presupuesto a esta materia, y que en el último año se había producido una reducción del 35,59%, pasando de los 463.357 euros a 298.460.
De esta forma, calificó a los servicios sociales de "modestos y limitados", y afirmó que en ellos "se descubre una falta absoluta de dirección política y de interés, atribuibles a la concejala responsable".
Como ejemplo señaló que "no existen programas de conciliación de la vida familiar y laboral", o al hecho de que todavía no estén en marcha las guarderías del Tambre y Tras Parlamento, así como las de Santa Marta y O Castiñeiriño, "prometidas en la campaña electoral", así como "el servicio municipal de canguros". También recordó que mientras que algunos municipios limítrofes, como los de Ames o Teo, cuentan con programas de conciliación durante las vacaciones escolares, "Santiago, no".
Por último, aludió también a la falta de aplicación de la Ley de Dependencia criticando que "en lugar de presionar a la Vicepresidencia de la Xunta, el alcalde se vaya a París a defender el teleférico ante la Unesco".
Como colofón ironizó con que la petición del pleno por parte del PP había impulsado al gobierno local a convocar de urgencia tanto el Consello Municipal de Migracións como el Consello de Servizos Sociais.
Más inversión
Por su parte, la concejala de Servicios Sociales, Mar Martín, anunció que en el próximo ejercicio se incrementará la inversión en materia de política social a pesar de la crisis. Tanto ella, como Elvira Cienfuegos, en representación del BNG, defendieron los programas puestos en marcha y los que está previsto desarrollar en 2009.

El Ayuntamiento aparca sin plazo la creación del Instituto de Benestar Social

La oposición dice que el área social carece de dirección y cuestiona el plan presentado por el gobierno local

El Ayuntamiento aparcará de momento la creación del Instituto de Benestar Social, uno de los proyectos estrella del PSOE para este mandato y sobre el que habría de recaer la reorganización de los servicios sociales para hacerlos más flexibles a las necesidades de los demandantes de sus prestaciones. Su creación era una de las prioridades del departamento que dirige la socialista Mar Martín, pero ni se menciona en el Plan Municipal de Benestar Social que la edila presentó anteayer para orientar las políticas del Concello en esa área hasta el 2013, a mediados de la próxima legislatura.
Según Martín, el instituto es «una herramienta, no la finalidad, para agilizar la gestión de los servicios sociales», y en tiempo de crisis es prescindible. Aunque defiende que proporcionaría una estructura operativa más dinámica, sostiene que ahora mismo no es una prioridad a corto plazo, frente a la necesidad de mejorar los recursos de base. No renuncia a él en el futuro, «pero podremos sobrevivir unos años más hasta ver cómo va evolucionando esto», afirma, aunque precisando que ello no quita para «que no vayamos modernizando» el servicio, que se está reestructurando ya.
Los socialistas han presentado el Plan de Benestar como la guía para la mejora de los servicios sociales a través de una atención integral y transversal, apoyada en un mayor esfuerzo económico, aunque la oposición ya le puso su primer pero: «No se va a adquirir ningún compromiso plenario con él», dijo ayer Paula Prado en el pleno convocado a petición del PP para abordar precisamente la situación de los servicios sociales y en el que Mar Martín obvió el aplazamiento de la creación del citado instituto, al que no se refirió pese a que la oposición se interesó expresamente por él, después de que el PSOE lo anunciase como «la panacea o la tierra de promisión».
En una dura intervención, Prado indicó que más que el mandato de los servicios sociales, como recordó que había definido el alcalde esta legislatura, «es el de su desmantelamiento», dijo ante la desaparición de la Casa de Acollida, la falta de un plan de igualdad y la reducción del presupuesto para Muller en un 35%. La popular sostiene que «falta dirección e interés» en el área social, también del alcalde, a quien reprochó «generar expectativas» entre los colectivos más necesitados. Después de año y medio de mandato «se podría tomar como una burla» su anuncio sobre el protagonismo que tendrían los servicios sociales en este gobierno, apuntó Prado, quien sostiene que el Plan de Benestar vale para que los ciudadanos «sepan a qué atenerse y lo que pueden esperar del Concello. «Solo pueden confiar en la sociedad civil, en las entidades sociales».
El BNG apuntó que la preocupación por los servicios sociales no es exclusiva del PP y que su grupo apuesta por la atención pero también por medidas preventivas para evitar las situaciones de vulnerabilidad y enumeró las acciones en distintos campos para mejorar la calidad de vida de los compostelanos, como la creación de residencias de la tercera edad. Por el PSOE, Mar Martín se apoyó en los datos de la memoria del servicio y en el Plan de Benestar para rebatir la visión del PP y justificó el cierre de la Casa de Acollida como la transición hacia un modelo de atención más adecuada a sus potenciales usuarias. Igualmente vinculó la reducción del presupuesto para Muller a ese cierre, pero apuntó que la dedicación presupuestaria al área social creció un 13%.

sábado, 8 de noviembre de 2008

El PP pide un pleno para que se dé cuenta de la política social ante la «falta de pulso» de esa área




El Partido Popular solicitó ayer la convocatoria de un pleno extraordinario para que el gobierno municipal exponga sus estrategias, objetivos, programas y recursos en política social. La oposición quiere conocer qué se ha hecho y se proyecta para el futuro en el área en la que Bugallo centró parte de su último discurso de investidura, hasta calificar a esta legislatura como la de las políticas sociales.
Lejos de esa proyección del regidor, el PP observa que este no solo no está siendo el mandato de las políticas sociales, sino que «es el del desmantelamiento de los servicios sociales». La responsable popular del seguimiento de la gestión del gobierno en este campo, Paula Prado, pone el cierre de la Casa de Acollida como ejemplo, así como la cifra de solicitudes resueltas entre las formuladas por la Ley de Dependencia. «Solo 11», dice, a lo largo del 2007 y 2008.
La concejala afirma que generar «falsas expectativas» en el campo de la asistencia social «nos parece una burla de mal gusto», porque «una cosa es no alcanzar los objetivos propuestos, y otra no hacer nada». Entiende que la «credibilidad del alcalde» ha quedado cuestionada ante la «manifiesta falta de pulso del área social» y dice que lo más innovador en este mandato ha sido la puesta en marcha de un servicio de pedicura, manicura y peluquería a domicilio para personas mayores, lo que para Prado «solo es maquillaje» por parte del gobierno local, cuya política social «parece inspirada en la célebre señorita Pepis».
La edil cree inadmisible esta situación ante la crisis actual, que «hará aumentar el número de personas solicitantes de las prestaciones sociales» del Ayuntamiento.

BUGALLO EXPULSA AL PP DEL PLENO

EL ESCÁNDALO DE INCOLSA